Virgencita negra que estás en el agua que estás en la tierra y en mi corazón Oh mi Yemayá quítame lo malo quítame lo malo y échalo en el mar

Cosas como tú son para quererlas cosas como tú son para adorarlas porque tú y las cosas que se te parecen son para guardarlas en mitad del alma

Mar, mar hermano mío mar en su inmensidad junto con mi barco carbonero mi destino prisionero y mi triste soledad

Con mucha alegría entonces comprendí que el amor de mi novia como mi pueblo no había cambiado y la paloma voló con rumbo desconocido

Ay ay amor ven, ven, no me niegues tu querer ay ay amor ven, ven, no me niegues tu querer Aunque tú a mí me hayas negado tu querer aunque no estés

La niña está triste ¿Qué tiene la niña? Qué puedo, yo, hacer para que sonría No puedo reírme me dijo la niña mi amor ha muerto y ha muerto mi vida

Adiós muchachos, compañeros de mi vida barra querida de aquellos tiempos me toca a mí hoy emprender la retirada debo alejarme de mi buena muchachada

Por el día que llegaste a mi vida paloma querida, me puse a brindar y al sentirme un poquito tomado pensando en tus labios, me dio por cantar

Jazmines en el pelo y rosas en la cara airosa caminaba la flor de la canela Derramaba lisura y a su paso dejaba aromas de mixtura que en el pecho llevaba