Que es de los mortales el consuelo al morir bendito Dios, porque al tenerte yo en vida no necesito ir al cielo, tizú si alma mía, la gloria eres tú

Rata de dos patas te estoy hablando a ti porque un bicho rastrero aún siendo el más maldito comparado contigo se queda muy chiquito

El canto sublime de las olas yo quisiera ser sólo para ti la rosa que estrena la primavera quisiera tener sólo para ti

Se te olvida que me quieres a pesar de lo que dices pues llevamos en el alma cicatrices imposibles de borrar

Estoy pensando en ti llorando y afuera el viento con un lamento llora conmigo estoy pensando en ti llorando pues no concibo que ya contigo todo acabó

Ando marchito y tú sin quererme hablar pero es que tienes el alma el alma de piedra y no sabes amar pero es que tienes el alma el alma de piedra y no sabes amar

Quiero que vivas sólo para mí y que tú vayas por donde yo voy para que mi alma sea no más de ti bésame con frenesí

Amémonos, mi bien, que en este mundo donde lágrimas tantas se derraman las que vierten quizás los que se aman tienen un no sé qué de bendición

Y volverán, volverán, volverán, volverán los días en que yo sonreía porque tú eras mía y el mundo de los dos